Todas las prótesis, sean del tipo que sean, requieren un mantenimiento y, cada cierto tiempo, una actualización parcial o renovación completa.
Esto es debido a que las prótesis dentales son elementos artificiales sometidos a:
- Fuerzas de la masticación
- En muchos pacientes, fuerzas excesivas por apretamiento dental o rechinar los dientes.
- Las prótesis dentales también están sometidas a muchas agresiones que pueden alterarlas (alimentos que tiñen, tabaco, alimentos calientes/fríos, apretamiento dental…)
- Y a esto, hay que sumar el inevitable envejecimiento de las personas, que modifica nuestros tejidos (encías, labios…)
Estos y otros factores influyen en que las prótesis dentales, con el paso del tiempo se muevan, produciendo roces y facilitando la entrada de comida.
También afectan a nuestra imagen, y a nuestra relación con los demás, puesto que se convierten en un problema a la hora de masticar, hablar, sonreír, estar en público…
Y si hablamos de prótesis fijas, se ponen en peligro a los dientes sobre los que asientan, que pueden fracturarse por fuerzas mal compensadas y formar caries por entrada de comida repetida entre las fundas y las encías.
Revisa tus prótesis anualmente. Es gratuito y altamente recomendable.
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